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La venta de Castañas asadas. Año 1995.
Cada año, cuando llega el otoño, aparecen por los distintos pueblos y ciudades del país los tradicionales puestos de venta de castañas asadas. En nuestra comarca, la campaña suele durar de dos a tres meses.
Los mayores recordarán todavía a los populares hermanos Lucio y Cele “Los Seronis” y al amigo Felipe “El Patata” al frente de la castañera.
Sin embargo, durante diez y siete años (concretamente desde 1975 a 1992), no hubo nadie en Aranda vendiendo este fruto traído del Bierzo (León), que a pesar de su pequeño tamaño presenta una inmejorable calidad y un sabrosísimo sabor.
A partir del citado año de 1992, Jenaro Vega -casado con una arandina y residente en Aranda desde 1977- reanudó la tradición castañera en esta localidad. Al principio, y durante dos años, despachó en el Arco silla, junto al Bar “La Perla”, trasladándose posteriormente a la Plaza de la Virgencilla, donde continúa en la actualidad.
En la fotografía de la portada vemos a Jenaro atendiendo a una clienta en el año 1995.
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